¿QUÉ DOCENCIA CONSTRUIMOS EN LA VUELTA A LA PRESENCIALIDAD?

Una oportunidad para repensar los vínculos entre adultos  y jóvenes  en la escuela secundaria.

Coordinadores: Verónica Silva, Magdalena Elli

Destinatarios/as: Docentes y directivos de nivel secundario.

Modalidad y duración: Virtual, dictado a través de la Plataforma digital. Dos meses de duración de cursado, evaluación, curso equivalente a 40 hs. reloj.

Descripción de la propuesta:

La pandemia y la declaración del “aislamiento social, preventivo y obligatorio” (ASPO) en el 2020, marcaron una huella en la historia de nuestras escuelas. Lo impensado se volvió posible. Docentes, familias y estudiantes, se vieron obligados a cambiar  de forma abrupta la modalidad que históricamente acompañó el acto pedagógico: el encuentro en un tiempo y un espacio escolar. Hoy, a dos años de  este episodio inédito, tenemos la oportunidad de reflexionar juntxs volviendo sobre las preguntas esenciales ¿de qué está hecha el aula? ¿se trata solamente de la materialidad que la estructura? Es decir, sus paredes, bancos,  pizarrones ¿O el aula está hecha del tiempo en el que se organizan sus actividades? Sus recreos, horas de clase, el ingreso, la salida, las horas libres. ¿O quizás el aula está hecha también de los vínculos que  se despliegan en su cotidianeidad?

Este curso de formación tiene por objetivo poner a disposición de lxs docentes un conjunto de coordenadas que, más allá o más acá de la presencialidad, nos ayudan reconstruir cuáles son los bordes,  los  relieves, los  territorios del aula. Creemos que el aula, se configura en el interjuego de cuatro pilares fundamentales: la confianza, la responsabilidad, el tiempo y la experiencia. Dichos  elementos son el  “cuerpo” del  vínculo educativo y pueden ser una llave para el aprendizaje y el sostenimiento de las trayectorias de lxs jóvenes estudiantes.

Proponemos mirar a lxs estudiantes como sujetos  juveniles, que se encuentran en la frágil situación de tener que construir su propia valía social (respeto).  Situación que involucra  múltiples conflictividades que interpelan el rol docente y que nos obliga a pensar conjuntamente modos de intervención institucional. Como dice Silvia Bleichmar (2008), si lo imprevisible es lo posible, que al menos no nos encuentre despojados de nuestra capacidad pensante, de la posibilidad de teorizar acerca de los enigmas del mundo, y por medio de ellos recuperar el placer de transformar lo pasivo en activo.

 Certificación: Certifican CTERA e INFoD, con Resolución Ministerio de Educación de la Nación, en el marco del Programa “Nuestra Escuela”.