Presentación del Programa
Los marcos normativos operan como discursos reguladores del proceso educativo en general y del accionar de los equipos de conducción en particular. Actualmente, ese accionar requiere de la construcción de conocimientos sobre una conducción superadora del reduccionismo que intentó imponer el neoliberalismo con la perspectiva de la nueva gestión pública.
Para ello, es necesario el abordaje de la complejidad del ejercicio del gobierno escolar y la definición de una cultura democrática en el cotidiano escolar con la participación de todos los sujetos que lo constituyen. Esto implica una intervención en los modos y formas en las que se despliega la organización curricular que asegure la posibilidad de enseñar y el acceso al aprendizaje, la conducción de cambios en los formatos organizativos de tiempos y espacios para el desarrollo del trabajo docente colectivo, la inclusión de las tecnologías, la participación en las decisiones de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes, el trabajo con las comunidades educativas y la utilización de los datos producidos desde la institución para resolver problemáticas de conducción.
La presente propuesta de formación fue pensada como un aporte para que los Equipos de Conducción Institucional favorezcan el trabajo colectivo de los docentes, acompañen las trayectorias de los estudiantes y consoliden la relación de la institución escolar con la comunidad y otras organizaciones de su contexto territorial e histórico.
En el actual contexto, totalmente condicionado por el avance de la pandemia del coronavirus en el mundo y en nuestro país, hemos considerado la modalidad virtual y un sistema de trabajo que denominamos co-autoasistido para favorecer procesos de formación organizados de acuerdo a las condiciones que cada sujeto dispone, en el marco de las drásticas modificaciones que se han producido en nuestras jornadas de trabajo y en las condiciones laborales generales.
La intención no es sobrecargar con más trabajo a lo que ya cada agente viene haciendo, sino, por el contario, poner a disposición un espacio para el estudio con ritmos propios, exigencias autorreguladas e instancias que “oxigenen” nuestras reflexiones en lugar de contribuir con el malestar docente en la cultura.
La propuesta de formación está pensada como una instancia para reflexionar sobre las propias prácticas y repensar los modos en que se hace el trabajo docente. La idea es iniciar la experiencia en carácter individual o grupal (constituyendo grupos de estudio a través del uso de las tecnologías), realizando las instancias de lectura y escritura con diversos géneros discursivos que le pueden imprimir huellas particulares a los procesos comunicativos y formativos.